Según estudios científicos, se ha proyectado que dentro de muy poco tiempo nuestro planeta no podrá satisfacer todas las necesidades que tenemos hoy en día, debido al fuerte aumento de extracción y consumo de los grandes (no por eso interminables) recursos naturales y desechos. En este contexto, es lógico que la respuesta a la tantas veces planteada y analizada pregunta: ¿Qué haremos con este problema que compromete a las generaciones futuras no tan lejanas?; no es una respuesta simple de responder, por lo que mientras no exista una solución permanente, la necesidad de que la sociedad sea “sustentable” parece ser el único método de salvación posible.
La creación de un ambiente sustentable como nos podemos dar cuenta, es una tarea complicada que tiene a las autoridades y personas trabajando para lograr encontrar la estrategia perfecta para combinar eficiencia económica, social y medioambiental. Para lograr este objetivo es necesario el compromiso de todas las personas. Es así como esta problemática ha llamado cada vez más la atención de las personas y en consecuencia, han enfocado y valorado más los bienes que tienen etapas sustentables dentro de la línea de vida del producto. Es por esto, que las empresas cada vez buscan adoptar políticas más sustentable a largo plazo, y disminuir el impacto socio ambiental que generan para generar valor en sus negocios.
Enfocándonos en la industria de retail, estudios que indican cómo actúan las organizaciones desde una perspectiva ética, ambiental y social en su gestión de desarrollo sustentable, posicionan a esta industria en el 4to lugar de la lista, lugar aceptable pero que requiere significativos cambios todavía. Hemos comentado anteriormente que hoy en día es más que necesario preocuparse por el impacto generado para lograr surgir y seguir adelante, creando ventajas comparativas como empresas en el mercado, generando cambios drásticos en su gestión y modo de operar, e invirtiendo grandes cantidades de dinero para lograr un beneficio futuro.
La industria de retail, de la misma forma que otras industrias, generan diversos impactos en el ambiente, en distintos aspectos. Algunos de ellos son:
Huella de carbono y cambio climático: Se requiere buscar la forma de disminuir la contaminación y emisión de CO2 o gases CO2 equivalentes que generan efecto invernadero, ya que si bien no es la industria que más impacto tiene en esta categoría, no deja de aportar fuertemente al aumento del calentamiento global. Algunas de las formas de hacer posible la reducción de este tan relevante problema, es con la disminución del consumo de energía o utilización de un mayor porcentaje de energía renovable, también se puede lograr utilizando nuevas tecnologías e instalaciones más ecológicas, y controlando los desechos de construcción que tanto se ven en esta industria, ya que excluyendo aquellas de venta online, la necesidad de espacios, en general amplios para realizar la transacción con el consumidor, requiere de una previa construcción que afecta en gran proporción el ambiente que intentamos mejorar. Una forma de compensar el daño ocasionado es, como lo hizo homcenter sodimac, haciendo una forestación que permita aumentar los “pulmones verdes”.
Desperdicios: Con desperdicios nos referimos no solo a las bolsas plásticas que se desechan diariamente en cantidades millonarias, sino también a artículos de oficina tóxicos, empaques, alimentos que no se eliminan de forma eficiente para aportar algún beneficio, etc. Un ejemplo de cambios drásticos que se han hecho en la industria para disminuir los desperdicios son las tantas campañas que apoyan la utilización de bolsas biodegradables, o bolsas reutilizables, que se han expandido a lo largo de nuestro país, y de las cuales hablamos anteriormente en le blog. Otra forma de disminuir los desperdicios de las empresas, es con la economía circular, que consiste en que el valor de los productos, materiales y recursos, se mantengan en la economía el mayor tiempo posible, así reduciendo los desecho emitidos.
Materias primas, productos y socios sustentables y estratégicos: Esta clasificación hace mención a no ignorar la procedencia de los alimentos o productos que se utilizan, a priorizar una creación responsable de bienes no solo propios, sino en apoyar a aquellos que se producen de forma sustentable o que al pasar a ser un desperdicio o desecho, no impacte tan fuertemente a nuestro ambiente. Si una empresa dice ser sustentable, no puede vender o utilizar productos que no lo sean, iría en contra de la imagen o “principios” que da a conocer que sigue. Con socios nos referimos a dar beneficio no tan solo ambiental como lo anterior mencionado, sino también un beneficio social, un ejemplo de accionar para un beneficios de esta índole es el apoyo a PYMES como proveedores de productos amigables con el ambiente.
Salud: Como muchas de las empresas de retail venden productos alimenticios, el compromiso con entregar productos de calidad y saludables también genera un beneficio social importante, o en el caso de los elementos deportivos, la forma en que son promocionados para aumentar ventas y aportar positivamente a la sociedad.
En contexto de lo anterior y adentrándonos en otro caso particular , tenemos a Falabella, el cual se ha percatado del impacto socioambiental que puede generar, atribuyendo dicho impacto a la construcción de locales, el consumo de energía y agua, en el transporte y en el uso de materias primas con su posterior reciclaje que llevan implícito las consecuencias del cambio climático.
A continuación se explicitan algunas de las medidas de eficiencia que Falabella ha adoptado para disminuir el impacto que genera.
Hace un par de años realizan las construcciones de sus locales con tecnología que produce un menor impacto en el medioambiente y a partir del año 2009 todas sus construcciones son eco-amigables, esto es, son construidas bajo criterios de la certificación LEED (Green Building Council) relacionadas con la eficiencia energética, el uso de energías renovables, la mejora de la calidad ambiental interior, la eficiencia del consumo de agua y el desarrollo sostenible de los espacios y en la selección de los materiales.
Además, en Falabella Retail se ha comenzado a implementar iluminación eficiente LED, la cual permite llevar un negocio mucho más limpio y eficiente energéticamente. Iniciativas como estas son las que se necesitan para poder tener una industria mucho más amigable con el medio ambiente.
Otras tiendas del mismo grupo que han adoptado medidas similares son Sodimac, Tottus, Rentas Falabella y Mall Plaza. En este último se implementó un programa de Gestión de Reciclaje Integral.
En conclusión, vemos que Falabella al igual que otras tiendas se adhiere a la iniciativa de acoplar medidas sustentables a su rubro, lo cual es una respuesta esperable frente a las distintas presiones que existen no solo de los respectivos “fiscalizadores” , sino que también de las reacciones que han generado las mismas personas , las cuales son conscientes del daño ambiental que sufre nuestro planeta a diario y también alzan la voz al momento de sentir que su entorno o bienestar personal es pasado llevar. Por lo tanto, las medidas tomadas por las empresas de retail no solo responden al impacto del cambio climático , la cantidad de desperdicios o la procedencia de los recursos, sino que también deben considerar hasta qué punto llega su accionar sin interferir de manera impertinente en el día a día de las comunidades.
Bibliografía:
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